Ahorraremos la incertidumbre: la respuesta rápida es no. Pero claro, como suele ocurrir con este tipo de preguntas complejas, la mejor aproximación sería “depende”. Al final se trata de valorar la aportación extra que supone un CRM y si efectivamente, la empresa lo necesita. Por tanto, para saber si es necesario un CRM para completar un ERP, vamos a necesitar un poco más que un párrafo.
Módulo de CRM en el ERP
Cada vez es más frecuente utilizar un CRM para completar un ERP en las empresas. Aunque un ERP generalmente cuenta con un módulo de CRM, éste suele ser básico; por lo que en numerosas ocasiones se necesita una funcionalidad más avanzada. Es evidente que la gestión de relaciones con clientes y prospectos es un asunto de vital importancia para una compañía, por lo que aún de forma básica, un CRM es una aplicación que ofrece un valor fundamental. Principalmente para los departamentos y trabajadores de ventas, marketing y servicio al cliente. Volviendo a la pregunta, un software de gestión de relaciones es necesario para completar un ERP, ya que ayuda sobre todo a:
- Hacer un seguimiento óptimo de la actividad comercial y de comunicación.
- Guardar y compartir información relevante sobre clientes y oportunidades.
El módulo de CRM de un ERP generalmente permite gestionar contactos, tareas, campañas, oportunidades y documentos, además de clasificar los contactos. En Microsoft Dynamics NAV además, existe la posibilidad de integrarlo con Outlook; así como una funcionalidad extendida para gestionar el servicio de atención al cliente.
Aún así, como comentamos, es cada vez más habitual contar con un software CRM, preferiblemente integrado en el ERP como propone Microsoft Dynamics con NAV y CRM. La razón es evidente: la venta es fundamental para las empresas y un CRM ayuda a cerrar ventas gracias a la gestión de relaciones para la que fue creado.
Software CRM integrado en el ERP
La orientación al cliente es la esencia de un CRM. Y conocer en profundidad al cliente adquiere una importancia capital en el mundo de los negocios actual; no sólo para ofrecerle un servicio excelente que le haga permanecer, sino para estrechar más esa relación.
Cuando una empresa cuenta con un número elevado de clientes, se hace muy difícil conocerlos a todos. Desde el momento que nos falta información de varios de ellos, los errores se suceden o la generación de oportunidades disminuye sin remedio, es recomendable meditar la implantación de un CRM.
Las capacidades de un software CRM amplían de forma importante las de un ERP:
- Detección de oportunidades.
- Gestión del servicio al cliente e incidencias.
- Automatización de procesos de venta.
- Automatización de acciones de comunicación.
- Análisis y monitorización de campañas.
- Escucha social.
Al final, la pregunta clave es: ¿quieres poner a tu cliente por encima de todo? Si la respuesta es sí, es necesario tener un software CRM para completar un ERP.