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Alternativas para la venta online en tu empresa

Etiquetas: eCommerce

La venta online hace referencia a todo tipo de transacciones comerciales a través de internet. Así, aunque generalmente se utiliza para describir la comercialización de productos a través de una tienda online, existen muchas alternativas a la hora de crear tu comercio electrónico.

Hay muchos tipos de eCommerce, dependiendo del eje de análisis que elijamos. Habitualmente se clasifica en función del cliente objetivo, pudiendo encontrar tiendas B2B (venta entre negocios), BSC (venta de negocio a consumidor final), híbridas (fusión de B2B y B2C), B2G (venta de negocio a institución, Gobierno o administración) o C2C (transacciones entre particulares).

Otra clasificación típica, menos habitual pero más simple, es la que tiene en cuenta la aproximación a la venta online. Con ella podemos distinguir las empresas que venden de forma física o tradicional pero ofrecen también venta online (Brick & Click) y aquellas que solo venden en línea (100% Click).

Esto, que parece una aproximación muy teórica, es una cuestión importante a la hora de comenzar a construir una tienda online ya que, al menos, nos permite valorar entre muy distintas alternativas. Dentro de cada una de ellas, es también importante saber que existen muchos tipos de tienda y, aunque nuestro producto a priori parezca imposible que se venda online, es altamente probable que alguien ya lo esté haciendo. Por ello, es recomendable realizar una investigación al respecto y descubrir las clases de eCommerce que existen: productos analógicos, productos digitales, servicios, etc.

Formas de vender en internet

La relevancia de la venta online es cada vez mayor para todo tipo de empresas. Además de un incremento de las compras (especialmente en el último año), la adopción de usuarios cada vez es mayor. Pero además, los usuarios compran de forma más frecuente.

Esto es así porque los hábitos de compra están cambiando, si es que aún no lo han hecho ya en tu sector:

  • La compra online es una compra de conveniencia.
  • Existe una amplísima oferta, sin apenas barreras físicas.
  • Habitualmente, el precio es menor que en las tiendas tradicionales.
  • Existe una creciente confianza, a medida que ha ido madurando el sistema.
  • La comunicación es muy fluida y el consumidor está expuesto a muchas opiniones o recomendaciones en las que confía.
  • La publicidad online es cada vez más habitual y eficaz.

Tanto los hábitos de compra como la relevancia del eCommerce nos dan una idea de la entidad que puede adquirir esta forma de venta en nuestro negocio. Si a ello le sumamos los distintos tipos de tienda online que podemos crear, no es difícil encontrar una forma para nuestro sector, negocio o empresa.

Pero nos falta una parte importante, ¿cómo ganamos dinero con la venta online? Aquí, de nuevo, tenemos múltiples alternativas:

  • Publicidad.
  • Retail online.
  • Venta de servicios.
  • Broking.
  • Suscripción.
  • Afiliación.
  • eLearning.
  • etc.

Alternativas en la venta online

Como toda aventura empresarial, el eCommerce necesita unos requerimientos para ser exitoso: público objetivo, experiencia de compra, modelo de negocio y objetivos. Además, una tienda online tiene sus propios “secretos” para funcionar, como la gestión de contenidos, imágenes de calidad, experiencia de usuario y otras cuestiones que se deben tener en cuenta.

Aunque es posible que tengamos una idea preconcebida para empezar a vender en internet, conviene conocer las distintas alternativas que se nos presentan. No sólo tenemos la opción de crear nuestra propia tienda, sino que existen muchas formas de vender productos en línea que se puede combinar o usar de forma exclusiva.

Para elegir la correcta, se debe conocer los hábitos de búsqueda del público objetivo, que son los consumidores que no van a ir (necesariamente) directos a nuestra tienda online a comprar nuestros productos. Estos usuarios pueden estar buscando lo que necesitan en marketplaces, páginas web corporativas, buscadores, comparadores, foros, blogs, agregadores de ofertas o, por supuesto, tiendas físicas.

Viendo la tendencia y las amplias posibilidades, la pregunta es, ¿cuándo empiezas?