Las pymes son el 99% de las organizaciones del mundo. Son la principal fuente de creación de empleo y tienen una importante contribución tanto a nivel social como económico. Con ese impacto, las pymes necesitan tener capacidad para seguir innovando y prosperando en una economía digital.
Durante la pandemia fuimos conscientes de la importancia de la transformación digital, y aquellas empresas que la pusieron en práctica, se desempeñaron mejor que las que no. Muchas consiguieron crecer gracias a ese enfoque tecnológico en un momento realmente complicado.
En un estudio elaborado por Microsoft con más de 3.000 pymes de todo el mundo, se ponen datos a ese sentimiento generalizado de que la adopción de tecnología digital contribuye al crecimiento más rápido.
El 70% de las empresas consideran el crecimiento como su principal impulsor y los early adopters de tecnología lo experimentan de una forma más elevada y más rápida. Estas pymes, además, tienen cuatro veces más probabilidades de éxito comercial en el futuro.
Los cambios derivados de la pandemia aún son visibles. Al 51% de las empresas consultadas, sus consecuencias aún les preocupan. El 80% esperan tener una fuerza laboral híbrida durante, al menos, los próximos dos años. Por motivos como este se requiere de una tecnología que respalde los nuevos modelos de trabajo de una forma confiable y segura. Así, más de dos tercios de las pymes planean aumentar sus presupuestos de tecnologías de la información y la comunicación:
- El 33% pretende incrementar la eficiencia operativa.
- El 32% quiere impulsar las operaciones comerciales y de marketing.
- El 31% apuesta por mejorar la retención de clientes.
Aunque la mayoría de las pymes reconocen la importancia de la tecnología para alcanzar sus objetivos, el 16% la considera esencial. Sin embargo, muchas empresas necesitan socios de confianza para alinear la tecnología adecuada con su estrategia empresarial. Casi la mitad elige socios tecnológicos, esperando que les recomienden de forma proactiva nuevas soluciones que aceleren el cumplimiento de sus objetivos.
La fuerza de trabajo millennial va un poco más allá. Estos trabajadores son más propensos a considerar que la tecnología es importante o esencial en el éxito empresarial. Casi un tercio de ellos se identifican como tecnófilos en sus vidas personales, un hecho que se refleja en la forma en la que se desenvuelven en el ámbito laboral.
Este cambio que se está produciendo en la fuerza laboral tiene otras consecuencias más allá de la tecnología. Dos tercios de las pymes, por ejemplo, tienen marcos de evaluación y monitoreo de criterios ESG, que están siendo impulsados por esos trabajadores más jóvenes. Ellos quieren reducir su impacto ambiental (37%), mejorar la diversidad (30%) y crear empleo (30%).
El estudio ofrece un dato sorprendente por el número que representa, aunque no por lo que significa. Y es que el 99% de las pymes del mundo están buscando activamente soluciones para abordar los desafíos actuales y generar nuevas oportunidades. Esta comunidad que tiene tan alto impacto en la economía y en la vida de tantas personas, no solo lo hacen para ser más resilientes y sobrevivir; sino también para prosperar, aportar innovación a sus industrias y valor a sus clientes.
Desde Microsoft continúan escuchando y aprendiendo de las pymes para alinear las soluciones con sus necesidades más concretas, manteniéndose siempre a la vanguardia. Con IGN como socio de confianza, las posibilidades son infinitas, ¿aprovechamos la oportunidad?